Fotografía por Jimena Madero Ramírez. Cerámicas por Las Severas Nenas. Pañoleta de Las Parceras.
Con el #28S de este año a la vuelta de la esquina, quisimos dedicar la segunda semana de nuestro especial #MujeresEnCuarentena a la manera en que la pandemia ha afectado nuestro derecho a acceder a servicios dignos de anticoncepción, aborto y reproducción.
A pesar de que los movimientos de mujeres y los feminismos son diversos, existen luchas comunes básicas que son innegociables. La defensa de nuestros derechos sexuales y reproductivos es una de ellas, y nos moviliza a a todas las mujeres feministas, sin importar desde qué orilla nos paremos.
Con la pandemia, esta defensa no ha bajado la guardia, pero la garantía de las instituciones sí. Luego de más de siete meses de emergencia sanitaria debido a la covid-19, los estragos empiezan a hacerse más visibles, y la disminución en el acceso a servicios relacionados con nuestra sexualidad. nuestra anticoncepción y nuestra reproducción están siendo cada vez más evidentes. Esta problemática, que a muchas de nosotras nos está impactando la vida desde hace meses, puede traducirse, en poco tiempo, en una crisis social que profundice las brechas de género en el país.
Según cifras del Fondo de Población de las Naciones Unidas UNFPA, se está proyectando que más de 47 millones de mujeres, adolescentes y niñas de países de ingresos medios y bajos, no van a poder acceder a métodos anticonceptivos. Esta carencia, podría traducirse en siete millones de embarazos no deseados en los próximos meses. ¿Cómo garantizar en nuestras sociedades que esta proyección no se haga realidad?
La entidad Profamilia advierte que la disminución en el acceso a servicios de salud sexual y reproductiva viene pasando hace meses. El estudio Solidaridad, que realizó la entidad entre el 8 y el 20 de abril de este año, y que quizó indagar por la respuesta social a la covid-19 encuestando a más de 3.500 personas mayores de 18 años, reveló hallazgos preocupantes sobre el impacto que la pandemia está generando en la salud sexual y reproductiva de las mujeres, un impacto que probablemente ha avanzado de abril a septiembre.
Profamilia encontró que aproximadamente una de cada cuatro mujeres tuvo alguna necesidad en salud sexual y reproductiva durante ese periodo de cuarentena, en comparación con uno de cada diez hombres. Asimismo, las personas identificadas con géneros no normativos tuvieron por lo menos una o más necesidades de este tipo.
Esta disminución en los accesos está afectando a una de cada cuatro personas afrodescendientes, a una de cada cinco indígenas y a una de cada cuatro personas con ingresos inferiores a 500 mil pesos mensuales. ¿Qué poblaciones específicas están viendo impactos mayores en su salud sexual y reproductiva durante la pandemia?
De toda la población encuestada, 20% tuvieron una necesidad desatendida de anticoncepción. El 13% de ese segmento, eran personas con ingresos menores a 500 mil pesos.
Las razones de la disminución de este acceso, afirma Profamilia, son variadas. La principal es que durante la pandemia la gente ha preferido no acceder a estos servicios para no salir de la casa, y hubo quienes preferían esperar a que acabara la cuarentena; pero también hubo razones como que la EPS o IPS había suspendido el servicio o la falta de recursos económicos para poder acceder a este.
Esto, sumado a las restricciones de movilidad y circulación que hubo los pasados meses debido a la pandemia, el colapso de centros de salud debido a la misma, y la falta de alternativas ante la contingencia, a pesar de que por decreto presidencial la salud sexual y reproductiva está considerada como un servicio esencial que debe continuar garantizándose en los centros de salud.
La organización Women’s Link registró durante esa época que organizaciones como la Fundación Oriéntame, que garantiza, entre otros servicios, el aborto legal y voluntario en el país, les informaron que tuvieron que movilizar anticonceptivos con tiempo previendo la escasez. «En general como toda la cadena de provisión de los anticonceptivos ha visto mucho lío en poder pasar todos los controles, en tener todos los permisos, en que los anticonceptivos lleguen a tiempo y estamos hablando de una institución que tiene este foco y tiene claro el enfoque; entonces capaz que hay muchas EPS que no priorizan estos temas y probablemente ni siquiera estén haciendo esa provisión», afirmó a El Tiempo la organización que promueve cambios sociales para favorecer los derechos de las mujeres y las niñas.
Si estas cifras de desatención aumentan, si la prestación de servicios relacionados con salud sexual y reproductiva sigue disminuyendo, ¿qué crisis relacionada con embarazos no deseados y abortos clandestinos vamos a tener que enfrentar en Colombia los próximos meses y años? ¿Quiénes van a ser las mujeres más afectadas por este aumento en la falta de atención? ¿De qué manera esta situación se va a ver traducida en brechas de desigualdad más profundas, aparte de las que ya están siendo visibles por la pandemia para nosotras?
A dos días del #28S, el Día de Acción Global por el Derecho al Aborto Libre, Legal, Seguro y Gratuito, queremos hacernos todas esas preguntas, y señalar que nuestros derechos sexuales y reproductivos no pueden y no deben parar con motivo de la pandemia. El movimiento feminista lo sabe, y por eso no ha parado de organizarse desde que empezó la emergencia, desde organizaciones de la sociedad civil, entidades privadas de salud, iniciativas autogestionadas e incluso encuentros y movilizaciones en el espacio público.
Desde MANIFIESTA queremos hacer nuestro aporte conmemorando este día y señalando que la lucha no para. Es por esto que la segunda semana del especial #MujeresEnCuarentena está enteramente dedicada a comunicar la importancia de defender nuestros derechos sexuales y reproductivos. Desde la necesidad de una educación sexual integral y un acceso libre a métodos de anticoncepción, así como la defensa férrea de nuestro derecho a abortar y de poder tener la garantía de una maternidad deseada digna.
¡Bienvenidxs a la segunda semana de nuestro especial sobre mujeres en la cuarentena!